Cartografía de la red ferroviaria en Mendoza: pasado, presente, futuro

Abstract

En el siglo XIX, el ferrocarril se convirtió en un símbolo del progreso material que promovían las elites políticas argentinas. su llegada a Mendoza, entre 1883 y 1885, marcó un punto de inflexión en la historia de la provincia. El incremento en la velocidad de las comunicaciones y la circulación de personas, mercancías e ideas impulsó la modernización de la sociedad y la economía local. La expansión de las vías férreas por el país dio forma a una red integrada y operativa a través de la cual los oasis productivos mendocinos quedaron vinculados con los principales mercados consumidores nacionales. Los caminos de hierro dinamizaron la economía agroindustrial vitivinícola, facilitando el ingreso de equipamiento técnico y el arribo de inmigrantes. Al mismo tiempo, estructuraron el espacio provincial impulsando el avance de la urbanización y de la frontera agrícola. A pesar de la competencia del transporte automotor desde las primeras décadas del siglo XX, el ferrocarril siguió teniendo un rol importante para el desarrollo local. Las empresas ferroviarias fueron nacionalizadas a mediados de 1940 y, desde entonces, las líneas del General San Martín y del General Belgrano recorrieron la geografía provincial. A finales del siglo, la privatización de las empresas estatales implicó el cierre de los trayectos no rentables y la concesión a empresas privadas del servicio de carga. Los actuales proyectos para mejorar y recuperar los servicios coexisten con iniciativas que han rescatado el valor patrimonial de la antigua infraestructura ferroviaria y la han refuncionalizado para usos culturales y turísticos.